Seedtag training GAM
Uniao de Leiria (2001-02)
Su segunda experiencia en los banquillos fue también corta. Apenas dirigió 23 partidos -ganó 11 empató ocho y perdió cuatro- al Uniao de Leiria. Su buen hacer -marchaba cuarto, un punto por encima del Oporto- propició que, mediada la temporada, en enero, fichara por los ‘dragones’.
Su aventura duró sólo 10 partidos, con un balance de cinco victorias, tres empates y dos derrotas. Se marchó, curiosamente, tras una espectacular victoria en el derbi contra el Sporting CP (3-0). Manuel Vilarinho, que le ganó las elecciones presidenciales a João Vale e Azevedo, tenía otro entrenador en mente y Mou ‘le echó un pulso’. Exigió una renovación de contrato que Vilarinho rechazó… y dimitió con efecto inmediato. «Si pudiese volver atrás, le habría renovado. Me di cuenta tarde de que el orgullo no puede anteponerse a los intereses de la institución», reconoció Vilarinho. Tarde
Benfica (2000)
Mourinho, tras ejercer de ayudante de ‘Bobby’ Robson y Louis van Gaal en el Barcelona, tuvo su primera oportunidad como primer entrenador en el Benfica. Jupp Heynckes fue destituido en la 4ª jornada de Liga y ‘The Special One’, hasta entonces asistente del alemán, aceptó el reto.
Su aventura duró sólo 10 partidos, con un balance de cinco victorias, tres empates y dos derrotas. Se marchó, curiosamente, tras una espectacular victoria en el derbi contra el Sporting CP (3-0). Manuel Vilarinho, que le ganó las elecciones presidenciales a João Vale e Azevedo, tenía otro entrenador en mente y Mou ‘le echó un pulso’. Exigió una renovación de contrato que Vilarinho rechazó… y dimitió con efecto inmediato. «Si pudiese volver atrás, le habría renovado. Me di cuenta tarde de que el orgullo no puede anteponerse a los intereses de la institución», reconoció Vilarinho. Tarde.
Su aventura duró sólo 10 partidos, con un balance de cinco victorias, tres empates y dos derrotas. Se marchó, curiosamente, tras una espectacular victoria en el derbi contra el Sporting CP (3-0). Manuel Vilarinho, que le ganó las elecciones presidenciales a João Vale e Azevedo, tenía otro entrenador en mente y Mou ‘le echó un pulso’. Exigió una renovación de contrato que Vilarinho rechazó… y dimitió con efecto inmediato. «Si pudiese volver atrás, le habría renovado. Me di cuenta tarde de que el orgullo no puede anteponerse a los intereses de la institución», reconoció Vilarinho. Tarde.